domingo, 23 de diciembre de 2007

Rubén Darío.

18 de enero de 1867 nace Rubén Darío, poeta y escritor nicaragüense. Desempeñó corresponsalías de diarios y empleos diplomáticos en El Salvador, Chile, Argentina, España, Estados Unidos y Francia. Entre sus obras se destacan Cantos de vida y esperanza y Prosas profanas. Encarna el movimiento modernista en América Latina. Su obra se caracterizó por la renovación del lenguaje poético, por las innovaciones temáticas, el esteticismo y el exotismo.

A principios del siglo pasado, Darío publicó el poema "Yo persigo una forma". Hablábamos en la sección del foro acerca de que, casi por definición, el ser humano vive con una sensación de desconcierto latente respecto de la realidad, siempre buscando sentidos. En Darío, esto tiene que ver también con un clima de época: la modernización acelerada a nivel mundial que desacomodaba el orden conocido. Ese desajuste anímico aparece en estos versos, por eso los reprodujimos aquí:

Yo persigo una forma que no encuentra mi estilo,
botón de pensamiento que busca ser la rosa;
se anuncia con un beso que en mis labios se posa
el abrazo imposible de la Venus de Milo.

Adornan verdes palmas el blanco peristilo;
los astros me han predicho la visión de la Diosa;
y en mi alma reposa la luz como reposa
el ave de la luna sobre un lago tranquilo.

Y no hallo sino la palabra que huye,
la iniciación melódica que de la flauta fluye
y la barca del sueño que en el espacio boga;

y bajo la ventana de mi Bella-Durmiente,
el sollozo continuo del chorro de la fuente
y el cuello del gran cisne blanco que me interroga.

Boletín de LibrosEnRed Nº 83
20 de diciembre de 2007

jueves, 13 de diciembre de 2007

De los Beatles al desamparo


REPORTAJE: Los caminos de la era pop
José Luis Pardo parte del 'Sgt. Pepper's' de los Beatles para reflexionar sobre la cultura de masas y la sociedad del bienestar
JOSÉ ANDRÉS ROJO - Madrid - 13/12/2007

Lo que ha hecho José Luis Pardo en su último libro, Esto no es música. Introducción al malestar en la cultura de masas, es sacar a pasear a algunos personajes de la portada del Sgt. Pepper's Lonely Hearts Club Band, de The Beatles, para que lo ayuden a diagnosticar los males de nuestro tiempo.

Lo que ha hecho José Luis Pardo en su último libro, Esto no es música. Introducción al malestar en la cultura de masas, es sacar a pasear a algunos personajes de la portada del Sgt. Pepper's Lonely Hearts Club Band, de The Beatles, para que lo ayuden a diagnosticar los males de nuestro tiempo. Y al mismo tiempo lo ha escrito al hilo de las canciones del Abbey Road, también de The Beatles. "No he hecho un libro de filosofía de la música. Sólo he querido producir con la escritura un efecto análogo al que produce la música", explica.

Ahí están pues, paseando por las páginas del libro, el disparatado escultor Simon Rodia, Bob Dylan, el boxeador Sonny Liston, las chicas que dibujó Vargas, los escritores Oscar Wilde, Bernard Shaw o William Burroughs, los cómicos Stan Laurel y Oliver Hardy, la actriz Mae West y el filósofo Karl Marx, entre otros. Algunos aparecen un instante, otros se quedan más tiempo. José Luis Pardo (Madrid, 1954) comenta que igual ahora al ver aquella portada es fácil decir que "de aquellos polvos vinieron estos lodos" y lo que se piensa es en una sociedad que desprecia la autoridad, que rinde culto a la juventud, en la que todo vale. "Cuando apareció el álbum, sin embargo, lo que se tenía en la cabeza eran otras cosas", dice. "Había allí personajes con historias increíbles y también muchos artistas vinculados al music hall, y actrices de cine y miembros de la Sociedad Fabiana, precursora de lo que fue el Partido Laborista, uno de los impulsores de la sociedad del bienestar".

Eran otros tiempos. Y lo que hace Pardo en Esto no es música (Galaxia Gutenberg / Círculo de Lectores) es recrear, a través de múltiples historias que se entrecruzan, aquel viejo impulso que hizo posible que la cultura popular conquistara su espacio, tuviera visibilidad, se afirmara con rotundidad. O lo que es lo mismo: lo que cuenta es el camino que tomaron las gentes de las clases más desfavorecidas para hacer oír su voz. El largo viaje que va del tugurio a la celebridad.

"No creo que tenga importancia alguna ponerse a discutir hoy sobre las diferencias entre alta cultura y cultura popular", comenta Pardo. "La diferencia entre ambas esferas es sólo un trasunto de la división de clases, y no dice nada. Importa más ver cómo se fueron difuminando las fronteras entre una y otra. En el mismo momento, por ejemplo, en que Elvis Presley grababa That's all right, mama, el Tribunal Supremo de Estados Unidos declaraba inconstitucional la educación separada de negros y blancos en las escuelas. Lo importante es darse cuenta, ahora cuando las identidades de cada grupo se afirman por encima de todo, que Elvis se olvidó entonces de que era un joven blanco y se puso a cantar como un negro. Importa entender que también a los Beatles se les olvidó que eran unos muchachos británicos y que por eso pudieron abrazar los ritmos que en sus orígenes habían inventado los esclavos de unas plantaciones".

Lo que Pardo ha perseguido en realidad es acercarse al estado de malestar de nuestro tiempo. Dice: "Esa nueva pobreza que se nos ha venido encima al mismo tiempo que se desarrolla vertiginosamente la técnica, ese sufrimiento sordo al que es cada vez más difícil darle voz". Y que es el inevitable correlato de la erosión del Estado de bienestar. "Las instituciones sociales han dejado de luchar contra las desigualdades. Habitamos una época donde reinan la exclusión y el privilegio. Las batallas por la igualdad están ahora desprestigiadas".

Cuando se habla de cultura popular, comenta José Luis Pardo, no se está hablando de folclor. Es algo esencialmente urbano y propio de la gran sociedad industrial. Los primeros cambios se produjeron en el siglo XIX, gracias al folletín y a los primeros antros de music hall. "Un día un tabernero inglés obtuvo permiso para habilitar al lado de la barra un escenario. Y allí se fueron subiendo los artistas de las clases trabajadoras y, en medio del bullicio, reclamaron la felicidad que les había sido negada".

Más adelante, ya en el siglo XX, llegó el cine con las peripecias y el humor de sus cómicos, tipos medio desarrapados como Charlot, a los que también saca Pardo de paseo en su libro. Las audiencias crecen. Con la música, el gran salto se produce en los cincuenta. Los programas de radio llegan a todas partes y, a finales de la década, explota el rock and roll. "De buena mañana / te avisé: / no me pises mis zapatos de ante azul, / aserrín, aserrán, / voy a tocar el violín: / no tengo nada que perder", cantaba Chuck Berry en Roll over Beethoven.

"Ahí está una canción como She's leaving home", recuerda Pardo. "A McCartney a veces se le iba la mano con la cursilería, pero luego incorporaba un elemento y la canción daba un vuelco radical. Está la chica que se va de casa y los padres que no lo comprenden. Se lo han dado todo, dispone de todas las oportunidades, y sin embargo se va. ¿Qué diablos quiere? ¡Diversión! Nada más que diversión. Y es que hubo un tiempo en que había para un joven otro destino que no fuera salir en busca del éxito".

Todo eso habría sido imposible si detrás no hubiera habido una sociedad que luchó por el Estado de bienestar, insiste Pardo, y vuelve sobre la importancia de "ese único ratito" en que las cosas marchaban porque la gente luchó para que las instituciones funcionaran.

¿Y la filosofía? "Platón y Aristóteles hablaron de la aspiración del hombre a dar sentido a lo que hace, y lo llamaron poesía, pero constataron que las cosas suceden sin sentido alguno, y a eso lo llamaron historia. Hegel quiso que la poesía se convirtiera en historia: justificar cuanto ha ocurrido en función de un final feliz. Nietzsche quiso hacer lo contrario porque sabía de las barbaridades que se cometen cuando la historia se convierte en una gran cruzada. Así que reclamó la felicidad ¡ya! y mostró que el sufrimiento no es una inversión rentable. Nietzsche, por cierto, amó un género tan popular como la zarzuela".

domingo, 9 de diciembre de 2007

Doris Lessing


EL PREMIO SE ENTREGARÁ EL LUNES
Lessing denuncia la falta de oportunidades en los países pobres en su discurso del Nobel
El texto de la británica lleva el sarcástico título 'No ganar el Premio Nobel'
'Somos un montón sobresaturado, nosotros en nuestro mundo', afirma

THOMAS BORCHERT (DPA)
ESTOCOLMO.- El que haya recibido el Nobel de Literatura a una edad avanzada no ha templado el carácter de Doris Lessing. La escritora, de 88 años, ha hecho en su discurso, leído en Estocolmo, una dura denuncia de la falta de oportunidades de las personas en los países pobres y la mentalidad de desechar todo rápidamente de la parte occidental del mundo. El galardón se entrega el próximo lunes.

Lessing no participará en la ceremonia de entrega por problemas de salud y ha hecho leer su texto en la capital sueca a su editor, el también británico Nicholas Pearson.

"Somos un montón sobresaturado, nosotros en nuestro mundo, en nuestro mundo amenazado. Somos muy rápidos con la ironía y el cinismo", señala en el texto, que lleva el sarcástico título 'No ganar el Premio Nobel'.

Lessing destaca una y otra vez el hambre de lectura y formación que tienen los alumnos en países pobres como Zimbabwe, donde vivió un cuarto de siglo, hasta 1949. Dado que en una escuela normal de ese país no hay dinero ni para tiza, y muchos menos para libros, las consecuencias son previsibles: "No creo que tantos alumnos de esa escuela puedan recibir galardones".

Por el contrario, afirmó, se puede estar "bastante seguro" de que sí puede ser ése el caso de una conocida escuela de varones con bonitos edificios en el norte de Londres, que ella visitó en su calidad de escritora conocida. Según asegura, allí no percibió ningún hambre por saber: "Seguramente todo aquel que da discursos recuerda ese momento en que mira y sólo ve rostros inexpresivos".

En Londres, cuando aparece una escritora nueva sólo se pregunta: "¿Es guapa?". Y en el caso de los hombres: "¿Carismático? ¿Atractivo?" "Hacemos bromas, pero eso no es gracioso", sostiene Lessing.

La autora de 'El cuaderno dorado' (1963) tampoco tiene piedad para Internet. "Sedujo a toda una generación con sus nimiedades, de manera que incluso las personas más o menos razonables admiten que es muy difícil desprenderse cuando uno se vuelve adicto".

Los que no recogieron su premio
Con su discurso, Lessing se suma a una singular serie de ganadores del Nobel de Literatura que se quedaron en casa enfermos o enfadados y no acudieron a la ceremonia en Estocolmo.

En 2005, lo hizo el compatriota de Lessing Harold Pinter (77) y antes la austríaca Elfriede Jelinek (61), que cancelaron su participación por enfermedad y enviaron sus discursos grabados en video a la capital sueca, ambos marcados por el enfado y la amargura.

Pinter leyó desde un estudio de la BBC en Londres con su voz debilitada por el cáncer una dura acusación contra el intento de EEUU de hacerse con el dominio del mundo. Jelinek lamentó ante una cadena televisiva vienesa en su discurso titulado 'Fuera de juego' el papel de la sociedad y su decadencia lingüística.

Doris Lessing tuvo que cancelar un día antes la lectura que ella misma iba a hacer. Pero seguramente la ausencia en las pomposas celebraciones del Nobel en Estocolmo la semana que viene es el problema menor para la escritora.

Cuando a fines de octubre le contaron cuál había sido la argumentación para darle el Nobel —"narradora épica de la experiencia femenina, que se propuso analizar una civilización fragmentada con escepticismo, pasión y fuerza visionaria"— comentó: "¿De verdad dijeron eso? Qué ridículo".

A continuación explicó que hace más de 30 años uno de los jurados le dijo con muy malos modos que nunca recibiría el Nobel de Literatura.

sábado, 8 de diciembre de 2007

Biografía de John Lennon


El 9 de octubre de 1940, bajo las bombas de un ataque sobre Liverpool de la aviacion alemana, nació John Winston Lennon. Su padre ejercia la profesion de marino y terminó divorciándose de su madre, Julia Stanley, cuando John tenía cuatro años.

También la madre se desentendió del pequeño, al que se consideraba incapaz de criar, que acabó bajo el cuidado de su tía Mimi. John encontraba cierta afición a la música y a pintar figuras grotescas y lisiados.

La situación estratégica del puerto de Liverpool convertía la ciudad en un lugar de paso para todas las tendencias musicales que llegaban de los Estados Unidos, y John creció escuchando a Little Richard, Chuck Berry, Ray Charles, Buddy Holly y muchos otros fenómenos del rock del country y el rhythm and blues.

Su infancia transcurrió en una relativa monotonía que con los años John llegó a añorar como una época feliz. Decía no conservar recuerdos demasiado felices ni demasiado desgraciados de aquellos años, y se sintió siempre muy afortunado por haber contado con su tía, especialmente después de la muerte de su madre, y a pesar de las diferencias culturales que mantenía con ella.

Por recomendación de sus profesores, que a pesar de sus mediocres resultados académicos quisieron ver en él cierto talento artístico, ingresó en la escuela de Bellas Artes donde conoció a Cynthia Powell, que con el tiempo sería su primera esposa.

A los quince años, todavía en Bellas Artes, decidió responder a su vocación musical y formó un grupo llamado "The Quarrymen". Poco después le presentan a un joven guitarrista llamado James Paul McCartney, al que invita a ingresar en el grupo animado por su habilidad para afinar guitarras.

Paul le presenta también a George Harrison, que se une a ellos en 1958. Fueron probando varios nombres, como "Johnny and the Moondogs" y "The Nurk Twins".

Por entonces, John acababa de redescubrir a su madre, cuyos problemas la habían mantenido al margen de su infancia, y con la que estaba iniciando una excelente relación. De repente, ese mismo año la madre de John murió atropellada por un policía borracho provocando en John un trauma del que nunca llegó a recuperarse. Se traslada de nuevo a casa de su tía y se dedica infructuosamente a buscar trabajo durante algun tiempo.

En 1960 el grupo reaparece con el nombre "Long John and the Silver Beatles", para luego probar con "The Silver Beatles" y finalmente "The Beatles". La explicación del nombre proviene de un juego de palabras del propio Lennon, que combinó Beat (ritmo) con Beetle (escarabajo).

Acompañando a Johnny Gentle junto con algunos músicos profesionales, los tres jóvenes viajaron a Escocia durante algunos meses, participaron en la parte musical de un espectáculo de Strip-tease y pasaron una temporada actuando en el barrio chino de Hamburgo.

De regreso a Liverpool se convirtieron en el grupo habitual del pub The Cavern hasta que en 1961 el propietario de una tienda de discos, llamado Brian Epstein, les propuso ofrecerse como manager, a cambio del 25 % de los beneficios.

En agosto de 1962 se celebra la boda de John y Cynthia Powell. De su matrimonio nacerá Julian, pero el éxito del grupo los irá distanciando.

Ringo Starr completó la formación de los Beatles al incorporarse en 1962 para sustituir a Pete Best, que en la batería no estaba al nivel de sus compañeros. El éxito de The Beatles pertenece a la historia de la Humanidad y les valió a sus integrantes el nombramiento en 1965 como Caballeros de la Orden del Imperio Británico.

Transcurren varios años de éxitos continuos, disputas, reconciliaciones y polémicas causadas por las declaraciones de Lennon, como la ocasión en que afirmó que los Beatles eran más famosos que el propio Jesucristo.

La muerte de Brian Epstein por sobredosis en 1967, y la boda de Lennon con la artista japonesa Yoko Ono celebrada en Gibraltar en 1968, fueron los desencadenantes de una ruptura que se gestaba desde hacía tiempo. Fue Lennon quien anunció la disolución del grupo en abril de 1970 con la célebre frase "el sueño se ha acabado".

Su temprano lanzamiento como escritor, con sus dos libros de poesía "In his own words" y "A spaniard in the works" de notable éxito, fueron buena muestra de que Lennon siempre tenía otras cosas en mente. Al conocer a Yoko Ono en 1966 y al intensificar sus mutuas relaciones, el tandem Lennon, McCartney dejó paso al nuevo Lennon-Ono, esto fue en cierta manera el origen del final de los Beatles. Yoko Ono fue la compañera de una trilogía de LPs que marcaron el inicio de la carrera de John fuera de los Beatles. Dichos LPs, todos lanzados en Apple, fueron "Two virgins", con la famosa portada con la foto del desnudo total de Lennon y Ono, "Life with the lions" y "Wedding album". Eran más bien experimentos conceptuales basados en ruido fuertemente influenciados por la carrera de Yoko Ono como artista plástica.

Después de una serie de actividades pacifistas que terminaron con la devolución por parte de Lennon de su condecoración como Miembro de la Orden del Imperio Británico, y que incluían sus famosas "Bed-Ins" y "Bagisms", grabaron "Give Peace A Chance" un himno pacifista compuesto por Lennon y atribuido a la recién formada Plastic Ono Band, dando ocasión al primer éxito de un Beatle fuera del grupo.

Con importantísimos músicos de apoyo, como Eric Clapton, The Plastic Ono Band actuaron en un festival en Canadá, que tuvo como resultado el lanzamiento de "Live Peace In Toronto 1969", que consistía principalmente en versiones de clásicos del rock y el estridente chillido de Yoko, y que contenía también una primitiva versión de "Cold Turkey" que fue luego el título de su siguiente LP, otro directo capturado en vinilo que venía avalado por el acompañamiento de músicos como George Harrison y Keith Moon.

Por esa época fueron invitados por los Rolling Stones a un intento de superprograma para la TV, llamado "Rock and Roll Circus". En realidad fueron invitados todos los Beatles pero sólo asistieron John y Yoko. El resultado fue una serie de números musicales que incluían a John Lennon, Eric Clapton, Keith Richards y Mitch Mitchell, grabados en un escenario circense instalado en los estudios de TV, que nunca llegaron a ser emitidos.

La canción "Instant karma" apareció como una de las últimas aportaciones de Lennon a los Beatles, pero él la consideraba más bien un escape de los constantes malos momentos que el grupo le hacía pasar antes de separarse definitivamente.

En Diciembre de 1970 fue publicado el primer LP de Lennon, sus primeros trabajos originales fuera de los Beatles, y era el resultado de un largo proceso de rehabilitación de su adicción a las drogas duras bajo la dirección del doctor Arthur Janov y su terapia, llamada Primal Scream, le llevó a crear un disco profundamente introspectivo titulado simplemente "Plastic Ono Band", donde encontramos piezas de doloroso exorcismo emocional como "Mother", "Isolation" y otras hasta extremos confesionales difíciles de creer dentro del rock.

El siguiente paso fue "Imagine", el más importante éxito de Lennon en solitario, un LP que contenía también declaraciones reveladoras como "How do you sleep" dirigida a McCartney para aclarar su antipatía, "Jealous guy", bellísima canción después versionada elegantemente por Roxy Music, y la canción que da título al LP, "Imagine", llena de pensamientos profundos. Su emigración a Estados Unidos en 1972 resultó en la creación de un nuevo grupo de acompañamiento, Elephants Memory, con los que John y Yoko, grabaron "Sometime in New York City" un LP repleto de ideales políticos de clara posición izquierdista, y que contenía también extractos de grabaciones en directo y una jam session con The Mothers Of Invention de Frank Zappa, pero aparte de breves momentos de inspiración terminó constituyendo simplemente, un documental.

En 1973 John se separó de Yoko Ono por 15 meses en lo que llamo su largo fin de semana, yendo a parar a California y altemando una vida dedicada al alcohol y a las drogas con la creación de dos LPS "Mind Games" y "Walls and Bridges", que incluían éxitos como "Whatever Gets You Through The Night", acompañado por Elton John, "Nº 9 Dream", "Mind Games", y Aisumasen (I'm Sorry) donde la voz de Lennon nos mantiene en suspense indefinido hasta oir un solo de guitarra excepcional, pero ninguno de estos discos tuvo el recibimiento comercial del anterior "Imagine". Lo mismo sucedió con su LP de tributo a sus héroes de siempre titulado "Rock'n'Roll" y Shaved Fish

Reestablecida su relación con Yoko, quien le dio un hijo, Sean, en 1975, se dedicó durante cinco años a la vida hogareña delegando todo asunto de negocios a Yoko y alimentando la creencia de su retirada definitiva de la música.

Sin embargo en 1980 vuelve a entregarnos un par de LPs repletos de nuevo material, el primero "Double fantasy", fue lanzado al mercado en otoño de ese año. Pocas semanas más tarde fue asesinado en su casa de Nueva York, el 8 de diciembre.

Esta tragedia derrumbó el ansiado sueño de todos los fans de The Beatles de verlos reunidos de nuevo como en los 60. Y también sirvió para convertir en automático éxito a "Double fantasy" y a su siguiente LP póstumo "Milk and honey". Los singles "Watching the wheels", "Woman" y "Just like starting over" fueron enseguida también a las cabezas de las listas, apoyados por un inmenso despliegue de biografías, discos de tributo, reediciones y manifestaciones en diversas ciudades que nos recordaban el permanente deseo de paz en sus canciones y su vida, que fue casi un ejemplo para miles de personas que imaginaron un universo bueno y libre, como en los mejores años del "flower power".

Give Peace A Chance (Written by John Lennon / Paul McCartney)


Two, one two three four
Ev'rybody's talking about
Bagism, Shagism, Dragism, Madism, Ragism, Tagism
This-ism, that-ism, is-m, is-m, is-m.

All we are saying is give peace a chance
All we are saying is give peace a chance

C'mon
Ev'rybody's talking about Ministers,
Sinisters, Banisters and canisters
Bishops and Fishops and Rabbis and Pop eyes,
And bye bye, bye byes.

All we are saying is give peace a chance
All we are saying is give peace a chance

Let me tell you now
Ev'rybody's talking about
Revolution, evolution, masturbation,
flagellation, regulation, integrations,
meditations, United Nations,
Congratulations.

All we are saying is give peace a chance
All we are saying is give peace a chance

Ev'rybody's talking about
John and Yoko, Timmy Leary, Rosemary,
Tommy Smothers, Bobby Dylan, Tommy Cooper,
Derek Taylor, Norman Mailer,
Alan Ginsberg, Hare Krishna,
Hare, Hare Krishna

All we are saying is give peace a chance
All we are saying is give peace a chance

viernes, 7 de diciembre de 2007

Frases de Gandhi...

Nuestra recompensa se encuentra en el esfuerzo y no en el resultado. Un esfuerzo total es una victoria completa.

La violencia es el miedo a los ideales de los demás.

Puesto que yo soy imperfecto y necesito la tolerancia y la bondad de los demás, también he de tolerar los defectos del mundo hasta que pueda encontrar el secreto que me permita ponerles remedio.

Ojo por ojo y todo el mundo acabará ciego.

Nadie puede hacer el bien en un espacio de su vida, mientras hace daño en otro. La vida es un todo indivisible.

Ganamos justicia más rápidamente si hacemos justicia a la parte contraria.

No hay camino para la paz, la paz es el camino.

Realmente soy un soñador práctico; mis sueños no son bagatelas en el aire. Lo que yo deseo es convertir mis sueños en realidad.

No se nos otorgará la libertad externa más que en la medida exacta en que hayamos sabido, en un momento determinado, desarrollar nuestra libertad interna...

Cortesía de Marco Antonio Guízar Ponce

lunes, 3 de diciembre de 2007

Geraldine Chaplin: "Fue sano pelearme con mi padre cuando era joven".


Geraldine Chaplin estima que para ella fue "sano" pelearse con su padre, el mítico actor y director Charlie Chaplin, durante la adolescencia "en vez de a los 40 años", según dice en una entrevista publicada hoy por el diario bonaerense Ámbito Financiero.
La actriz, que se encuentra en este país con motivo del Festival Internacional de Cine de San Luis, contó además que su padre "se deprimía en Navidad, ya que nuestras fiestas eran de mucha opulencia y él recordaba su infancia de niño pobre". "A mí me daban una naranja", es la frase que recuerda Geraldine Chaplin que decía su padre -quien murió precisamente un día de Navidad- mientras ellos abrían sus regalos.
Geraldine Chaplin estuvo peleada con su padre entre los 14 y los 21 año. "Fue algo muy sano -dice-. Peor es cuando una se pelea con los padres a los cuarenta. O, como le pasó a mamá, que al casarse con papá, su padre (el dramaturgo Eugene O'Neill) no quiso saber más nada con ella. Oona O'Neil tenía 17 años cuando se casó con Chaplin que tenía 53. Eugene O'Neil incluso se negó a conocer a sus nietos. "No sólo a mí, que nací al año siguiente (de la boda), sino también a Michael y Josephine", explica Geraldine.
La actriz profesa una gran admiración y amor por su madre, fallecida hace 15 años, y afirma que sus hermanas y ella querían ser como ella, "pero creo que yo no le llegué ni a la punta de los talones". "Papá predicaba valores, pero era mamá quien daba el ejemplo", recuerda la presidenta del jurado del Festival de San Luis, que se celebra hasta el domingo próximo en la provincia homónima del centro de Argentina.
La actriz afirma que la monogamia es una de las cosas que tanto ella como sus hermanos heredaron de su madre, "o al menos (la tendencia a mantener) relaciones largas", señaló.
Chaplin se mostró convencida de que si su madre "no se hubiera dedicado de lleno a cuidar a papá quizás hubiera sido escritora, ya que escribía unas cartas impresionantes, pero eligió voluntariamente dejar de lado sus dones por mi padre".
Geraline Chaplin es madre de dos hijos: Oona (hija del fotógrafo cubano Patrizio Castillo), a quien define como "un huracán que más que hija mía parece hija de Sofía Loren", y Shanen (hijo del director de cine español Carlos Saura), quien prepara el doctorado en psicología.
"Antes del doctorado, Shane estuvo años atendiendo a enfermos terminales sin techo que la policía recogía de la calle, y también trataba con niños golpeados o violados en Miami. Un ambiente como el que debió haber conocido su abuelo cuando era niño en Londres", explicó.
La actriz recordó también que cuando Charlie Chaplin hizo fortuna en el cine se llevó a su madre a vivir con él, "pero ya estaba mal, un día te reconocía, otro andaba como perdida, y para mi padre ese era un gran dolor".
"Todo su bienestar perdía sentido cuando la miraba. Mi abuela nunca pudo enterarse del éxito mundial de su hijo, del amor que le tenía el público", indicó.

Miércoles 21 de noviembre de 2007